Fuente: Diario Medico.
La vacuna frente a la angiotensina reduce la hipertensión arterial (HTA), mejora la adherencia al tratamiento y, en algunos casos, podría sustituir a las terapias antihipertensivas convencionales.
La fase IIa del ensayo que evalúa esta vacuna abunda en los resultados que ya se habían presentado en la última reunión anual de la Asociación Americana del Corazón, en Orlando, según se publicará mañana en The Lancet.
Martin Bachmann, de Cytos Biotechnology, la compañía suiza que desarrolla la vacuna antiangiotensina CYT006-AngQb, ha coordinado el estudio sobre tres grupos de 24 pacientes hipertensos cada uno, a los que se administró la inyección subctuántea con 100 mg de la vacuna, con 300 mg, o un placebo. La administración se realizó en las semanas 1, 4 y 12, y se determinó la presión arterial antes de iniciar el tratamiento y en la semana 14.
El grupo que recibió la mayor dosis de vacuna registró una reducción de la HTA en la semana 14 de 9/4 mm Hg, comparado con el grupo del placebo. En los tres grupos se produjeron cinco casos de efectos adversos -relacionados con la inyección subcutánea-, aunque no lo bastante graves como para interrumpir la terapia.
"La reducción en la tensión arterial fue especialmente pronunciada a primera hora de la mañana, cuando el sistema renina-angiotensina-aldosterona es más activo y se producen más accidentes cardiovasculares".
La vida media de los anticuerpos que genera la vacuna es de unos cuatro meses tras la inyección, lo que la convierte en "compatible para un régimen terapéutico de unas pocas inyecciones anuales, que coincide con el número de visitas del paciente hipertenso al médico".
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